El letal coronavirus COVID-19
El tema del coronavirus realmente es todo un TEMA. Leo, escucho y veo sobre ese virus, el ahora llamado COVID-19, en todos los medios de comunicación. Y la verdad es que necesito saber la evolución de esta “epidemia”, si hay mejorías, si hay más víctima, el alcance socioeconómico, su virulencia, etc. Toda esta información la tengo a diario, pero hay un dato que solo leí tímidamente al principio de la alarma mundial “a qué sector de personas el coronavirus afecta hasta la muerte”. Esto, que debería ser un mantra constante para rebajar la histeria colectiva, no se nos dice. Brilla por su ausencia.
Este viernes se registró lo que más se temía, la primera muerte en Europa. Mi estómago igual que un bote de tomate en conserva. Yo planeando si quitar a mi hijo del colegio por posible contagio. Cual es mi sorpresa que entrando a la noticia leo: hombre de nacionalidad china, originario de Hubei, 80 años.
Mi histerismo descendió rápidamente. Y sigue mi eterna pregunta: ¿a quién afecta gravemente hasta la muerte el COVID-19? En ningún momento se ha comunicado cuántos niños, jóvenes y adultos han fallecido ya. Podría entenderse por el secretismo del gobierno chino, pero ¿de verdad que no hay más datos?
Anoche empecé a ver El Objetivo y la directora de Salud Pública de la OMS, María Neira, estaba allí. Sólo pude ver 30 min, los suficientes para que mi marido se quedara ojiplático al ver la diferencia entre las muertes por coronavirus y las de la gripe, muchas más a causa de la segunda. Si él, un persona que revisa los periódicos diariamente se quedó impactado y con cierto alivio, como no se quedarán los no asiduos a las noticias cuando vean esto? Pienso que es un dato a machacar en todo momento por los medios de comunicación.

Creo recordar que quizás el alto número de fallecidos en China también sea por la falta de materiales sanitarios, algo importante a tener en cuenta para nuestra sicosis personal.
El alarmismo crea ciudadanos alarmados y eso provoca situaciones alarmantes, por lo que yo creo que se debe estar a lo que se debe estar: información amplia, muy amplia y constante.